PEQUEÑO RELATO
“3/03/2015”
Hoy no debería haberme levantado.
Me ha salido, me sale todo mal ¡qué rabia!
Esta tarde, no me
he bajado en la parada de autobús que me correspondía, he parado dos paradas
más adelante, distraída, y he tenido que
ir a mi lugar de destino, andando, y temiendo
llegar tarde. Luego, en clase de
literatura, le dije al profesor
que yo era una superdotada…¡qué cosas tiene el subconsciente!
Esta
mañana fui al médico y en la puerta, una enfermera iba llamando a los pacientes,
por número y por nombre, con un orden impecable.
Yo creí llevar el 27,
y cuando la enfermera iba a llamar al 26, yo ya estaba en la puerta…
¡uy…, soy muy impaciente!
Cuando llamó al 27, pronunció otro nombre… ¡Anda,
no era yo!
Yo no me llamo Mª Asunción. En ese momento quería que me
hubiese tragado la tierra y desaparecer o marchar, invisible, a mi asiento en
la sala de espera. Me quedé estupefacta y además, noté risitas pecaminosas. La
tierra no me tragó y acudí a mi asiento de la sala de espera aferrándome a mi
libro de cuentos “Zen”.
El cuento de los patos, me tapó la cara. Más tarde miré mi
número y ¡claro!, tenía el 37, tuve que esperar.
Y es que hay días en que, con lo bien que se está en la cama con un buen libro, con la radio, o
con un Tebeo de Mortadelo y Filemón, ¿por qué se tiene una que levantar?
Alicante 3/03/2015
Mª Jesús Ortega Torres
No hay comentarios:
Publicar un comentario